La biodiversidad que nos rodea
Siempre se ha dicho que nuestro territorio es de una gran diversidad ecológica. Para medir esta afirmación solo hace falta fijarse en la riqueza de paisajes, hábitats y especies que lo forman.
En poco más de 30.000 km2, hay más de 600 tipos de hábitats diferentes. Encinares, hayedos, abetales, tarteras, lagunas, … son una pequeña muestra representativa de la excepcional biodiversidad del país.
Desgraciadamente la elevada presión humana sobre el territorio está comportando la degradación y fragmentación de los hábitats. Problemática que se ha convertido en la principal causa de pérdida de biodiversidad.
En este escenario de transformación del territorio es esencial parar el declive de los hábitats para proteger la biodiversidad y conservar los ecosistemas. Acciones como una correcta gestión y protección del territorio permitirá que especies bioindicadores o amenazadas puedan, de nuevo, vivir y reproducirse en condiciones naturales.
Algunos ejemplos son las especies ilustradas en este tubular.

Quebrantahuesos| Gypaetus barbatus
Fuente: Fundació Catalunya La Pedrera

Nutria| Lutra lutra
Fuente: Fundació Catalunya La Pedrera
Quebrantahuesos
Gypaetus barbatus
Considerada una especie en peligro de extinción en Europa. Sin embargo, en nuestro territorio, y gracias al proceso de recuperación se han llegado a censar un centenar de ejemplares distribuidos en 46 territorios del Pirineo y Prepirineo, como el desfiladero de Mont-rebei o la Montaña de Alinyà.
A diferencia del resto de buitres, el quebrantahuesos es osteófago, es decir, que se alimenta principalmente de huesos. Cuando el hueso es demasiado grande para ser tragado, se lo lleva a cierta altura y lo deja caer contra las rocas para que se rompa en fragmentos pequeños que sean más fáciles de comer, de ahí su nombre.
Nutria
Lutra lutra
Este mamífero carnívoro semi acuático es considerado un buen bioindicador de la calidad ecológica del agua ya que sólo puede vivir en ríos, lagos y lagunas de aguas limpias con peces abundantes y con un frondoso bosque de ribera donde esconderse y descansar.
La destrucción de sus hábitats y la contaminación la llevó casi a su extinción. Actualmente y gracias a la recuperación de la calidad ecológica de nuestros ríos, esta especie protegida está en proceso de recuperación y expansión para nuestras cuencas
Oso pardo
Ursus arctos
Una de las especies más emblemáticas de la fauna pirenaica que desapareció del territorio hacia finales de los años ochenta debido a la persecución humana con armas, trampas y venenos. Gracias a su reintroducción, el número de osos poco a poco está volviendo a crecer en el territorio.
Además, al tratarse de una especie paraguas, su recuperación favorece la conservación de su hábitat. Suele vivir entre masas forestales como abetos o pinos y prados alpinos o subalpinos. A pesar de su fama de carnívoro, más del 75% de su dieta es de materia vegetal. Puntualmente, puede atacar animales vivos, incluyendo los domésticos, pero con una correcta gestión los ataques se reducen al mínimo.

Lobo| Canis lupus
Fuente: Fundació Catalunya La Pedrera

Oso pardo | Ursus arctos
Fuente: Fundació Catalunya La Pedrera
Lobo
Canis lupus
A finales del siglo pasado se extinguió el último lobo que quedaba en el territorio. Su condición de depredador comportó que fuera una especie perseguida por el ser humano, hasta hacerlo desaparecer. A pesar de las connotaciones negativas, el lobo es una especie clave en la conservación del ecosistema.
Su dieta basada en el consumo de herbívoros regula indirectamente las comunidades vegetales consiguiendo un equilibrio. Actualmente, parece que se está recuperando su presencia en el territorio de forma natural con ejemplares procedentes de los Alpes.
Cabra
Capra pyrenaica hispanica
La elevada presión de caza ejercida sobre esta especie hizo que las abundantes poblaciones de cabras que habitaban el territorio disminuyeran notablemente hasta llegar a desaparecer en algunos puntos.
Actualmente y gracias a la creación de varias reservas y planes de recuperación se ha conseguido volver a ver ejemplares saltando ágilmente entre las rocas del Parque Natural de Montserrat y del Parque Natural de los Puertos de Beceite.
Lince europeo
Lynx lynx
Conocido popularmente como lince boreal, este mamífero de la familia de los felinos habitaba los bosques de los Pirineos hasta hace unos 50 años. Al igual que el oso y el lobo, fue eliminado debido a la gran competencia con la ganadería extensiva.
Recientemente, se ha reintroducido con éxito en los bosques europeos. Esperamos que en un futuro nuestros bosques puedan volver a estar ocupados por este magnífico depredador.

Cabra | Capra pyrenaica hispanica
Fuente: Fundació La Pedrera Natura

Lince europeo | Lynx lynx
Fuente: Fundació La Pedrera Natura
Corzo
Capreolus capreolus
Es el más pequeño de la familia de los cérvidos y el más abundante en el territorio gracias a los diferentes procesos de reintroducción realizados por fines cinegéticos. Vulgarmente es conocido como “el duende del bosque” por su habilidad para aparecer y desaparecer en cualquier lugar y por la forma sigilosa que tiene de moverse entre la vegetación. Es muy ágil y se alimenta de hojas de arbustos o árboles bajos, bayas y brotes tiernos.
La ausencia de sus depredadores naturales, como el lobo, hace que sus poblaciones se extiendan ampliamente por el territorio y sólo estén reguladas por actividades cinegéticas.
Morito
Plegadis falcinellus
Especie limícola que se alimenta principalmente de peces y ranas, aunque su dieta puede incluir insectos y crustáceos. Nidifica en los árboles o en carrizales, formando colonias. Su hábitat natural son las zonas húmedas y cálidas, principalmente litorales.
Hace unos años se consideraba una especie en estado de conservación vulnerable, pero últimamente sus poblaciones han aumentado espectacularmente pasando de 200 a 2.000 ejemplares, favorecido por la buena conservación de los hábitats donde se ha observado como es el Delta del Ebro.
Flamenco
Phoenicopterus roseus
Su nombre científico significa pájaro de alas de fuego, y es que su peculiar coloración rosada se debe a uno de los microorganismos que comen, la Artemia salina. Un pequeño camarón que se encuentra en lagunas, salinas y humedales litorales, hábitats estos propios del flamenco.
En nuestro territorio se encuentran principalmente en el Delta del Ebro, en lagunas de poca profundidad y de excelente calidad ecológica como son la Tancada o la Encanyissada.

Morito | Plegadis falcinellus
Fuente: Fundació Catalunya La Pedrera

Rebecos | Rupicapra rupicapra
Fuente: Jordi Dalmau, Fundació Catalunya La Pedrera
Una Fundación para proteger y conservar el patrimonio natural y el paisaje
Desde la Fundación Catalunya La Pedrera trabajamos para la conservación de la naturaleza y la protección de los espacios naturales, impulsando todo tipo de medidas e iniciativas para la recuperación y mejora de la calidad ambiental.
La creación de la Red de Espacios Natura en propiedad, un modelo único en el territorio nos permite conservar y mejorar la biodiversidad y el paisaje, ofrecer oportunidades a las personas que viven, así como gestionar el uso público de estos espacios de forma activa e innovadora.
En los espacios que actualmente constituyen la red, existen una gran diversidad de hábitats que permite a las especies emblemáticas o amenazadas encontrar de nuevo un espacio para vivir.

Flamenco| Phoenicopterus roseus
Fuente: Fundació Catalunya La Pedrera